En ecología existen muchas clasificaciones que se utilizan para entender y estudiar las diferentes relaciones entre los organismos y el medio que los rodea.
Por ello, se habla de jerarquías ecológicas, tomando en cuenta desde un organismo en particular hasta todo el conjunto de seres vivos que habitan la Tierra y el medio físico donde están insertos, conocido comobiosfera.
Uno de estos rangos de estudio se denomina bioma. Los biomas o zonas (regiones) ecológicas corresponden a un conjunto de formaciones vegetales que están constituidas por una combinación característica de plantas y animales, adaptados a las condiciones de suelo, temperatura y precipitación imperantes.
Son sectores biogeográficos de gran extensión, cuyos factores centrales son la vegetación y el clima imperante, ya que toda forma de vida animal depende de la base vegetal existente (conformando a su vez diferentes relaciones de intercambio energético); además, el segundo factor influye directamente en las especies que han logrado sobrevivir (adaptarse) a las condiciones ambientales imperantes, por ejemplo, a temperaturas extremas, como en el caso de los desiertos o el Ártico.